Entradas

Mostrando entradas de julio, 2011

Harta de tus aires de grandeza.

Por este tipo de historias es por lo que te odio como si no hubiera mañana. Podrías hacerme un favor e intentar no joderme la maldita existencia cada 2 días. Y si te cuesta mucho trabajo, desaparece de mi vista.

Dormía en mi memoria.

Tengo arranques de nostalgia cuando llevo tiempo sin verte. Me sucede a menudo, pienso en algo estúpido y al final estás tú, navegando por la estupidez de mi memoria. Y se que se pasará, que son ratos que no tienen sentido vivir… y que cada vez serán menos frecuentes. Como una enfermedad de la que acabaré totalmente curada, así eres tú. Mi final, mi veneno. Te quise tanto…

Sustantivo, verbo, adjetivo.

Quiero hacer una investigación sobre el amor. El amor romántico, nada de amor sexual. Ese que dicen que traspasa límites, que no tiene fronteras para el que lo siente. Que te vuelve un poco estúpido a la hora de razonar, y que te hace malgastar horas de estrellas razonando sobre lo que “podría ser”. Aquel que inspiró tantos poemas, tantas canciones y melodías maravillosas. Una pizca de cada uno de nosotros, dicen, sin la que no podríamos vivir. Y yo me muero por saberlo, quiero conocer que sensación abarca. Cómo un “Te amo” termina convirtiéndose en el eje primordial de toda una existencia. Palabras que determinan qué queremos hacer, mejor, a quién queremos querer. Amor, es lo único que tengo. O quizás lo único de lo que carezco.

Las horas.

Por primera vez tengo miedo de empezar. De sentir de verdad cosas que antes dolían, de morirme en tus brazos antes de despertar. Por primera vez no se si estoy dispuesta, si mi vida pende de un hilo por estar contigo. Pues soy una niña a tu lado, y esto va tan deprisa que temo que me deje atrás.

Dos días.

Fue algo tan extraño. Mientras nuestros labios transmitían hitos de esperanza, dijiste “te quiero”, rodeados de estrellas mientras me estrechabas contra tí. Y yo no supe si creerte. En su lugar sonreí, sonreí! Por toda respuesta.

Sueña que sueña.

Imagen
Te echo de menos. A ese tú que no eres tú.  La vida se está riendo de nosotros. Y algún día terminaré riéndome yo de ella.